Un año de pandemia, el teletrabajo y la nueva normalidad: cómo el equipo global de Frauscher logró establecer un nuevo mundo laboral
La comunicación externa (es decir, el intercambio global con nuestras sedes, proveedores y clientes) también tuvo que llevarse a cabo prácticamente de la noche a la mañana, un cambio que en Frauscher dominamos sin problemas.
Estamos especialmente orgullosos de los seminarios web en formato digital: hasta la fecha, varias de nuestras oficinas (en la India, el Reino Unido, Norteamérica y Polonia) ya han explicado de forma experta nuestras soluciones y productos en sesiones especialmente producidas, estimulando así los debates. También estamos (todavía) conectados digitalmente con nuestros clientes: las reuniones para la aceptación de productos, las reuniones con clientes y las formaciones en el espacio virtual ya se han convertido en algo habitual. Las sesiones de formación de los clientes tienen lugar incluso a través de un portal dedicado que permite, entre otras cosas, debates interactivos. Todas estas medidas no solo contribuyen a una digitalización más rápida, sino que también influyen positivamente en nuestra huella ecológica.
Por supuesto, no son solo las herramientas, las plataformas o los equipos modernos los que nos han ayudado en estos tiempos de incertidumbre y nos siguen acompañando. Estamos especialmente agradecidos al equipo de producción, que también mantuvo el fuerte in situ durante la pandemia, que sigue produciendo sin cesar y que, de esta forma, “mantiene el negocio en marcha”. Andreas Dorfer, empleado del departamento de Sistemas P, comenta sobre el cambio de situación: “Al principio era una sensación extraña, porque nadie de otros departamentos podía entrar en la zona de producción. En general, había una gran incertidumbre, ya que nadie sabía lo peligroso que era realmente el virus. En un principio, me costó bastante adaptarme, ya que, por ejemplo, varios materiales solo se encontraban en estaciones de transferencia definidas y no se reponían automáticamente. Sin embargo, con el tiempo, las cosas se asentaron bastante bien”.
La familia y el teletrabajo: ¿funcionan nuestros esfuerzos de conciliación?
¿Cómo concilia su vida familiar con sus obligaciones profesionales y las comunicaciones con sus compañeros? A estas alturas, las experiencias y las lecciones aprendidas son muy variadas. Stefan, director de Sistemas de I+D, ha configurado su propia oficina en casa y puede trabajar sin que le molesten. Markus Bernroitner, miembro del departamento de Recursos Humanos, valora mucho poder pasar más tiempo con su familia gracias a poder trabajar desde casa.
Sin embargo, siempre es un reto hacer justicia a ambos. La experiencia de algunos empleados lo demuestra: para evitar distraerse demasiado, es esencial establecer nuevas reglas de forma conjunta para evitar problemas de convivencia.
